Saltar al contenido
Deberes escolares » Charlas educativas » Alan Kay comparte una poderosa idea sobre las ideas – Charla TED2007

Alan Kay comparte una poderosa idea sobre las ideas – Charla TED2007

Charla «Alan Kay comparte una poderosa idea sobre las ideas» de TED2007 en español.

Con toda la intensidad y brillantez por la que es conocido, Alan Kay prevé mejores técnicas para educar a los niños usando computadoras para ilustrar experiencias en formas -matemáticas y científicas- que sólo se pueden hacer con computadores.

  • Autor/a de la charla: Alan Kay
  • Fecha de grabación: 2007-03-03
  • Fecha de publicación: 2008-03-04
  • Duración de «Alan Kay comparte una poderosa idea sobre las ideas»: 1237 segundos

 

Traducción de «Alan Kay comparte una poderosa idea sobre las ideas» en español.

Una gran manera de empezar, creo, para mi idea de simplicidad, es mirar a TED.

Aquí están ustedes, comprendiendo por qué estamos aquí, lo que está sucediendo, sin ninguna dificultad.

La mejor inteligencia artificial del planeta lo encontraría complejo y confuso, y mi pequeño perro Watson lo encontraría simple y comprensible, pero no comprendería la idea.


(Risas)
Él lo pasaría de maravilla.

Y por supuesto, si presentasen aquí, como Hans Rosling, un presentador encuentra esto complejo, difícil.

Pero en el caso de Hans Rosling, él tenía una arma secreta ayer, literalmente, al tragar las espadas.

Y debo decir que pensé en varios objetos que podría tratar de tragar hoy y finalmente me rendí; pero él lo hizo y fue algo maravilloso.

Y Puck no sólo trató de decir que somos tontos despectivamente, sino que somos fáciles de engañar.

De hecho, lo que Shakespeare trataba de decir es que vamos al teatro para ser engañados, así que es algo que en realidad deseamos.

Vamos a espectáculos de magia para ser engañados.

Y esto hace a muchas cosas divertidas, pero hace difícil obtener una visión del mundo donde vivimos, o de nosotros mismos.

Y nuestra amiga, Betty Edwards, la señora de Dibujando En El Lado Derecho Del Cerebro, muestra estas dos mesas a su clase de dibujo y dice: el problema que tienen al aprender a dibujar no es que no puedan mover su mano, sino que la forma en la que su cerebro percibe imágenes es defectuosa.

Está tratando de percibir imágenes como objetos en vez de ver lo que está ahí.

Y para probarlo, dice ella, el tamaño y la forma de estos tableros es idéntica, y se los voy a probar.

Ella hace esto con cartón, pero como tengo una costosa computadora acá, sólo voy a rotar a este amiguito y….

Ahora habiendo visto esto -y lo he visto cientos de veces, porque uso este ejemplo en cada presentación que doy- aún no puedo ver que son del mismo tamaño y forma, y dudo que ustedes puedan hacerlo.

¿Como lo hacen los artistas? Bueno, los artistas miden.

Ellos toman medidas de forma muy, muy cuidadosa.

Y si miden con mucho cuidado y con un brazo firme y un borde rígido, se darán cuenta que esas dos formas son exactamente del mismo tamaño.

Y el Talmud vio esto hace mucho, diciendo, que vemos las cosas no como son, sino como somos nosotros mismos.

Me gustaría mucho saber qué fue de la persona que tuvo esa reflexión entonces, si realmente la prosiguió hasta su conclusión final.

Así que si el mundo no es como parece y vemos las cosas como somos nosotros, entonces lo que llamamos realidad es una forma de alucinación que sucede acá dentro.

Es un sueño lúcido.

Y comprender que es ahí donde existimos es una de las barreras epistemológicas más grandes de la historia humana.

Y eso que es: «simple y comprensible» puede que no sea simple o comprensible, y cosas que creemos complejas pueden hacerse simples y comprensibles.

De algún modo tenemos que auto-comprendernos para corregir nuestros defectos.

Podemos pensar de nosotros como un canal ruidoso.

La manera en la que yo lo veo es que, no podemos aprender a ver hasta que admitamos que estamos ciegos.

Una vez que comiences en este nivel tan humilde, entonces puedes encontrar formas para ver la cosas.

Y lo que ha pasado en los últimos cuatrocientos años específicamente es que los seres humanos han inventado «brainlets»: pequeñas partes adicionales para nuestro cerebro, conformadas de ideas poderosas que nos ayudan a ver el mundo de formas diferentes.

Y estas están en la forma de aparatos sensoriales -telescopios, microscopios-, aparatos de razonamiento, variadas formas de pensar, y lo más importante, en la habilidad de cambiar la perspectiva de las cosas.

Voy a hablar un poquito sobre eso.

Es este cambio en perspectiva, y lo que pensamos que estamos percibiendo, lo que nos ha ayudado a progresar más en los últimos cuatrocientos años que durante el resto de la historia humana.

Y aun así, que yo sepa no se enseña en ningún colegio en EE.

UU.

Una de las cosas que van de simple a complejo es cuando hacemos más.

Nos gusta más.

Si hacemos más de una forma estúpida, la simplicidad se torna compleja.

Y de hecho, podemos hacerlo durante mucho tiempo.

Pero Murray Gell-Mann habló ayer sobre las propiedades emergentes.

Otro nombre para eso podría ser «arquitectura» como una metáfora de tomar los mismos viejos materiales y pensar en maneras no-obvias y complejas de combinarlos.

De hecho, de lo que hablaba Murray ayer era de la belleza fractal de la naturaleza, de tener descripciones similares en varios niveles, todo se reduce a la idea que las partículas elementales son al mismo tiempo pegajosas y distantes, y se mueven de forma violenta.

Esas tres cosas dan vida a todos los diversos niveles que se acercan a la complejidad en nuestro mundo.

¿Pero qué tan simple? Y cuando vi el Gapminder de los Roslings hace algunos años, pensé que era lo mejor que había visto para comunicar ideas complejas de un forma simple.

Pero luego pensé, oye, quizás es demasiado simple.

Y puse algo de esfuerzo en chequear y ver qué tan bien estas simples representaciones de tendencias en el tiempo cuadraban con algunas ideas e investigaciones, y encontré que calzaban muy bien.

Entonces los Roslings han sido capaces de simplificar sin retirar lo que es importante de los datos.

En cambio el filme que vimos ayer de la simulación dentro de una célula, como un ex biólogo molecular, no me gustó para nada.

No porque no fuera hermoso o algo así, sino porque le faltaba lo que la mayoría de los estudiantes no comprenden sobre biología molecular, y eso es: ¿por qué existen probabilidades de que dos formas complejas se encuentren unas a otras de la forma precisa para combinarse y ser catalizadas? Y lo que vimos ayer fue, que cada reacción era fortuita.

Sólo se precipitaban en el aire y se unían, y algo pasaba.

Pero en realidad esas moléculas están girando a un ritmo de casi un millón de revoluciones por segundo.

Recorren su distancia total para cada lado cada dos nanosegundos.

Están muy juntas entre sí.

Están atascadas, y se golpean unas con otras.

Y si no comprenden eso en su modelo mental de esto, lo que sucede dentro de una célula parece completamente misterioso y fortuito.

Y pienso que esa es precisamente la imagen incorrecta cuando se está tratando de enseñar ciencia.

Otra cosa que hacemos es confundir la sofisticación adulta con la comprensión real de un principio.

Un niño de 14 años en secundaria recibe esta versión del teorema de Pitágoras, que es una prueba muy sutil e interesante, pero en realidad no es una buena forma de comenzar a aprender sobre matemática.

Entonces, una forma más directa, que da más la sensación de matemáticas, es algo más parecido a la prueba del propio Pitágoras que era algo así.

Tenemos este triángulo, y si rodeamos ese cuadrado C con tres triángulos más y lo copiamos, noten que podemos mover esos triángulos hacia abajo así, y eso deja dos áreas abiertas que son algo sospechosas, y bingo.

Y eso es todo lo que tienen que hacer.

Y este tipo de prueba es el tipo de prueba que necesitan aprenden cuando se está aprendiendo matemática para darse una idea de lo que eso significa antes de que se fijen en, literalmente, 12 o 1500 pruebas del teorema de Pitágoras que han sido descubiertas.

Ahora miremos a los niños pequeños.

Esta es una profesora muy inusual que era una profesora de kindergarten y de primer grado, y que era naturalmente matemática.

Ella era como ese amigo suyo que es un músico de jazz que nunca estudió música, pero es un músico increíble.

Ella simplemente podía sentirlas, y aquí están sus alumnos de seis años, y los tiene haciendo formas de otras formas.

Entonces ellos eligen una forma que les guste -un diamante, o un cuadrado, o un triangulo, o un trapezoide- y luego tratan de hacer la siguiente forma de esa misma forma, y la siguiente forma más grande.

Y pueden ver aquí que los trapezoides son algo complicados.

Y lo que esta profesora hizo en cada proyecto fue hacer que los niños actuaran primero como si fuera un proyecto de arte creativo y después algo científico.

Entonces crearon estos artefactos.

Y ahora ella los tenia mirándolos y haciendo este trabajo; en lo cual pensé por mucho tiempo, hasta que ella me explico, era para darles tiempo para pensar.

Y cortaban las pequeñas piezas de cartón ahí, y las pegaban.

Pero el punto de esto es hacer que ellos mirasen esta tabla y la llenaran.

¿Qué aprendieron sobre lo que hicieron? Y entonces, Lauren de seis años noto que el primero usó uno, y el segundo usó tres más, y el total era de cuatro para ese.

El tercero tomó cinco más, y el total fue de nueve en ese, y luego el siguiente.

Entonces ella noto de inmediato que las piezas adicionales que había que agregar en los bordes siempre iba a crecer por dos.

Entonces ella estaba muy confiada sobre como obtuvo esos numeros de ahí.

Y ella podía ver que esos eran los números cuadrados hasta el seis.

Donde no estaba segura de cuanto era seis por seis, y cuanto era siente por siete.

Pero luego ella volvió a estar confiada.

Eso fue lo que hizo Lauren.

Entonces la profesora, Gillian Ishijima, hizo que los niños trajeran todos sus proyectos al frente del salón y los pusieran en el piso.

Y todos enloquecieron.

¡Mierda! ¡Son iguales! Sin importar cuales fueran las formas, la ley de crecimiento es la misma.

Y los matemáticos y científicos en el público reconocerán estas dos progresiones como una ecuación diferencial discreta de primer orden y una ecuación diferencial discreta de segundo orden.

Derivadas por niños de seis años.

Bueno, eso es bastante asombroso.

Eso no es lo que usualmente tratamos de enseñar a niños de seis años.

Ahora veamos cómo podemos usar la computadora para esto.

La primera idea acá es sólo para mostrarles el tipo de cosas que los niños hacen.

Estoy usando el software que estamos poniendo en el laptop de 100 dólares.

Ahora me gustaría dibujar un pequeño autito acá.

Lo haré muy rápidamente.

Y le pongo una gran rueda.

Y obtengo un pequeño objeto acá, y puedo ver dentro de este objeto.

Lo llamaré un auto.

Y acá hay un pequeño comportamiento: el auto avanza.

Cada vez que le hago click, el auto gira.

Si quiero hacer un pequeño programa para repetir esto varias veces, sólo arrastro estos y los echo a andar.

Y puedo tratar de conducir el auto…

¿ven al auto girar por cinco? ¿Qué pasa si bajo esto a cero? Se mueve en línea recta.

Esa es una gran revelación para un niño de nueve años.

Hacerlo ir en la dirección contraria.

Pero obviamente eso es un poco como besar a tu hermana comparado con manejar un auto.

Entonces los niños quieren hacer un manubrio.

Dibujan un manubrio.

Y lo llamaremos manubrio.

Y, ¿ven la dirección del manubrio acá? Si giro esta rueda, pueden ver ese número ahí yendo a negativo y positivo.

Esa es como una invitación para tomar esos números saliendo de ahí y colocarlos aquí en el programa.

Y ahora puedo conducir el auto con el manubrio.

Y es interesante.

Ustedes saben el problema que tienen los niños con las variables, pero aprendiendo de esta manera, en una situación, nunca olvidan después de la primera vez lo que es una variable y como se usan.

Y podemos reflexionar aquí como lo hizo Gillian Ishijima.

Así que si miran a este pequeño programa, la velocidad siempre será de 30.

Vamos a mover el auto, según eso, una y otra vez.

Y estoy dejando un puntito por cada una de esas cosas.

Están espaciados uniformemente porque están a 30 de distancia.

¿Y qué pasa si hago esta progresión que hicieron los niños de seis años al decir, OK, voy a incrementar la velocidad por dos cada vez, y luego voy a incrementar la distancia por la velocidad cada vez? ¿Qué obtengo ahí? Obtenemos un patrón visual de lo que los niños de nueve años llamaron aceleración.

¿Así que cómo hacen ciencia los niños? (Video) Profesora: Objetos que ustedes creen que caerán a la tierra al mismo tiempo…

Niño: Esto es genial.

Profesora: No pongan atención a lo que hacen los demás.

¿Quién tiene la manzana? Alan Kay: Tienen pequeños cronómetros.

Profesora: ¿Qué obtienen? ¿Qué obtuvieron? AK: Los cronómetros no son lo suficientemente precisos.

Niña: 0,99 segundos.

Profesora: Pongan «pelota de esponja»; Niña: Había una bala y una pelota de esponja, porque son de pesos totalmente diferentes.

Y si las sueltas al mismo tiempo, quizás caerán a la misma velocidad.

Profesora: Suéltala.

AK: Obviamente Aristóteles nunca le pregunto a un niño sobre este tema específico, ya que no se molestó en hacer el experimento, y tampoco lo hizo Santo Tomas de Aquino.

Y no fue hasta que Galileo lo hizo que un adulto pensó como un niño.

Sólo hace 400 años.

Vemos un niño como ella por como cada clase de 30 niños que va directo al punto.

Ahora, ¿qué pasa si queremos ver esto más detenidamente? Podemos tomar un vídeo de lo que está pasando, pero aún si pasamos este vídeo paso a paso, es complicado ver qué esta pasando.

Y lo que podemos hacer es, podemos poner los cuadros uno al lado del otro, o apilarlos.

Entonces cuando los niños ven eso, dicen.

«Ah, aceleración,» recordando cuatro meses antes cuando hicieron sus autos, y comienzan a medir para ver qué tipo de aceleración es.

Y entonces lo que estoy haciendo es medir desde el fondo de una imagen hasta el fondo de la imagen siguiente, casi un quinto de segundo después, así, y se ponen cada vez mas rápidas.

Y si apilo estas cosas, podemos ver las diferencias, el incremento en velocidad es constante.

Y dicen, «oh, sí, aceleración constante.

Eso ya lo hicimos.» ¿Y cómo podemos ver y verificar que lo tenemos? No podemos ver mucho sólo haciendo que la pelota caiga ahí, pero si hacemos caer la pelota y corremos la película al mismo tiempo, podemos ver que hemos obtenido un modelo físico preciso.

A propósito, Galileo, hizo esto de una forma muy astuta haciendo correr una pelota hacia atrás por las cuerdas de su laúd.

Yo saqué esas manzanas para acordarme de decirles que esta probablemente es una historia como la de Newton y la manzana, pero es una buenísima historia.

Y pensé que haría una sola cosa en este laptop de 100 dólares para probarles que esto funciona.

Una vez que tienes gravedad, aquí está; aumentar la velocidad por algo, aumentar la velocidad de la nave.

Si arranco este jueguito que los niños hicieron, chocará la nave espacial.

Pero si me opongo a la gravedad, aquí vamos — oops!
(Risas)
Una más.

Sí, ahí estamos.

Sí, ¿De acuerdo? Creo que la mejor forma de terminar esto es con dos frases.

Marshall McLuhan dijo: «Los niños son los mensajes que enviamos al futuro.» Pero de hecho, si lo piensan, los niños son el futuro que enviamos al futuro.

Olvídense de los mensajes.

Los niños son el futuro.

Y los niños en el primer y segundo mundo, y especialmente en el tercer mundo, necesitan mentores.

Y este verano vamos a construir 5 millones de estos laptops de 100 dólares y quizás 50 millones el próximo año.

Pero aunque hicieramos lo imposible, no podríamos crear mil nuevos profesores este verano.

Y eso significa que nuevamente tenemos una situación donde podemos introducir tecnología, pero falta la tutoría que se requiere para pasar de un sistema iChat simple y nuevo de mensajería instantánea a algo con mayor profundidad.

Pienso que esto debe hacerse con un nuevo tipo de interfaz de usuario.

Y este nuevo tipo de interfaz de usuario puede hacerse con un gasto de unos 100 millones de dólares.

Parece muchísimo, pero es literalmente 18 minutos de lo que estamos gastando en Irak.

Estamos gastando 8 mil millones al mes.

18 minutos son 100 millones de dólares.

Así que esto es barato.

Y Einstein dijo: «Las cosas deben ser lo más simple posible, pero no más simples.» Gracias.

https://www.ted.com/talks/alan_kay_a_powerful_idea_about_ideas/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *