Saltar al contenido
Deberes escolares » Charlas educativas » John Walker recrea grandes interpretaciones – Charla EG 2007

John Walker recrea grandes interpretaciones – Charla EG 2007

Charla «John Walker recrea grandes interpretaciones» de EG 2007 en español.

Imagine por un momento que los grandes pianistas del pasado vuelven a tocar hoy, al igual de como lo hubieran hecho en persona. John Q. Walker demuestra cómo las grabaciones pueden ser analizadas para detectar las pulsaciones precisas teclado y movimientos del pedal, para luego ser reproducidas nuevamente en grandes pianos controlados por computadoras.

  • Autor/a de la charla: John Q. Walker
  • Fecha de grabación: 2007-12-12
  • Fecha de publicación: 2008-08-26
  • Duración de «John Walker recrea grandes interpretaciones»: 821 segundos

 

Traducción de «John Walker recrea grandes interpretaciones» en español.

El 99 por ciento de nosotros tiene el sueño de escuchar.

No siendo músicos — sino audiencia,

¿correcto?

Y anhelamos una cosa, aunque muchas veces no lo sabemos.

Anhelamos estar en la misma habitación con el músico el día de la grabación, el día de la interpretación.

Y vamos a conciertos en vivo, a tantos como podamos.

Pero el otro 99 por ciento de nuestras cosas las escuchamos grabadas.

Y resulta que cuanto más retrocedemos en el tiempo, más áspero se vuelve el sonido.

Y entonces decidimos que había una solución a este problema.

Extraigamos la interpretación, como entidad, de la grabación, que fue como se concibió en un principio.

Ya saben, todo el tinglado de micrófonos en el estudio durante todo el día.

Pero la interpretación en sí misma radica en los dedos del intérprete, y el instrumento utilizado.

Y esa es la pieza clave dentro de la grabación.

Para acometer esto, se necesita una gran cantidad de hardware y software que funciona a una gran resolución.

Yamaha creó una cosa increíble llamada Disklavier Pro, que se asemeja a un piano de cola — y posiblemente no se hayan percatado de que realizará todas estas tareas — pero esta repleto de solenoides, fibra óptica y computadoras y todos estos artilugios de la mejor resolución venida de Japón.

Y esto no serviría de nada sin atravesar la línea de la alta definición.

Y logramos atravesar esta línea, llamada ‘el valle misterioso’, en términos de inteligencia artificial.

Se basa en un proceso en el cual transferimos al ordenador y digitalizamos, y luego se activa toda una serie de análisis.

Y observamos cada una de las notas, y todos sus atributos: la intensidad y manera con la que fueron pulsadas, y el movimiento de los dedos.

Con lo cual, tuvimos que desarrollar una nueva ciencia sobre el movimiento de los dedos.

y, como todos sabemos, es algo que un profesor de piano enseña.

Pero nunca antes habíamos tenido una ciencia sobre estas cosas.

Voy a comenzar con Glenn Gould.

Murió hace 25 años y nació hace 75.

Fue un pianista consumado y alabado, quizá más grande pianista de culto del siglo XX.

Simplemente se cansó de estar frente a la audiencia, pues se empezaba a sentir como «un monito de la interpretación», en sus propias palabras.

Así que se distanció y se dedicó a trabajar su arte.

Y la especialidad de Gould era Bach.

Quizás su más famosa grabación fue algo así como «Las Variaciones Goldberg».

Bach sólo escribió temas y variaciones una vez.

Escribió algunas piezas tempranas, pero más tarde en su vida, en su período de madurez, dijo: «Aquí hay un tema —- 30 variaciones».

De hecho, el tema no es sólo la melodía, es la línea base.

Y Gould hizo dos grandes grabaciones que quizá ustedes conozcan, una en mono y la otra en estéreo.

Para la grabación en mono, por cierto, utilizó el pedal.

Y según envejecía, dijo: «No, no, espera un momento».

«Voy ser muy científico con esto y no voy a utilizar el pedal».

Lo que me gustaría que escucharan es la versión en vivo de 1955, y tocaremos el primer par de piezas de ella.

Glenn Gould, 1955.

(Música)

¿Qué tal eso?


(Aplausos)
Ahora permítanme contarles un poco acerca de cómo esto fue posible.

Primero, permítanme llevarlos al último paso.

Esto es, — tenemos un proceso bastante complejo que implica software, músicos, etc., pero una vez hemos terminado, sabemos que el oído es el último juez.

Podemos tocar el original en un oído y una nueva grabación en el otro.

Y eso mismo es lo que voy a hacer ahora para Uds.

con lo que acabamos de escuchar.

El altavoz derecho será la grabación original.

Y el altavoz izquierdo será la nueva grabación, en un instrumento justo como este, y voy a reproducir las dos grabaciones simultáneamente.

(Música) Este es el original.

(Música) Antes de Parque Jurásico, no había ciencia para saber cómo pendía la piel fuera del músculo,

¿cierto?

Pues bien, en el mundo del vídeo, hemos sido capaces de inventar, en nuestros tiempos, un comportamiento natural.

y este es otro ejemplo de ciencia detrás del comportamiento natural.

Y ya pudieron escuchar la versión original.

En última instancia, comencé con la experiencia.

Y la experiencia es «quiero estar en la misma habitación con el músico» Muchos de ustedes pueden permitirse comprar uno de estos.

Pero, si no, ahora hay sonido envolvente de alta definición.

Y si no han escuchado sonido envolvente de alta definición, vayan a su tienda de confianza, a su vendedor audiófilo.

Es tan envolvente en comparación con la calidad del estéreo regular.

Pero si no lo tienen, podrían escucharlo con auriculares.

Y en el mismo disco tenemos cinco grabaciones.

Sony tiene cinco grabaciones.

Y podrían escucharse con auriculares a través de este dispositivo denominado «grabación binaural».

Es básicamente una cabeza de maniquí sentada frente al instrumento con micrófonos en las orejas.

y cuando te colocas los auriculares y lo escuchas, te encuentras en el cuerpo de Glenn Gould.

Y causa risa hasta que — ustedes saben, los músicos, quienes son músicos, quienes tocan el piano, escuchan esto y dicen: «¡No puedo creerlo! Es exactamente como oír tocar el piano».

Excepto que ahora estás en el cuerpo de Glenn Gould tocando el piano, y uno se siente como si sus dedos tomaran las decisiones y se movieran a través de todo el proceso.

Es un cambio de juego.

Ahora tenemos algo que conocemos con una calidad espectacular.

Тodo el proceso es muy sensible a la temperatura y humedad.

Lo que escuchamos hoy no era perfecto.

Pues es una amalgama de madera y hierro fundido y fieltro, y cuerdas de acero y todo eso, Todo asombrosamente sensible a la temperatura y la humedad.

Con lo cual, cuando entras a la sesión de grabación, se tiene que detener la grabación después de cada pieza y reconfigurar el piano si es necesario.

Existe toda una acción estando sentado allí, por un lado; y la cabeza de maniquí y nuestros ingenieros de grabación de pie alrededor mientras reacomodamos el piano.

Sin colocar fecha final, paso a paso, la música se convierte en datos, como lleva ocurriendo en todas las áreas en los últimos 30 o 40 años.

El audio se ha unido tarde a este juego.

No estoy hablando de digitalización, bits y remasterización.

Estoy hablando de la conversión en los datos de los que se partió originalmente, que es cómo se interpretó.

Y el audio llegó tarde porque nuestro oídos son muy difícil de engañar — Son de alta resolución y están conectados directamente a nuestras emociones, y no se les pueden engañar fácilmente.

Ya se sabe que los ojos son fáciles de satisfacer con algo de color y movimiento.

Bien, aquí tenemos este episodio de Star Trek.


(Risas)
Ya lo entiendo — todo me quedó claro ayer.

Mi episodio de Star Trek fue el de James Daly interpretando a Methuselah —

¿Lo recuerdan?

Y en un momento se pone a bailar con su — y no les arruinaré el episodio, de 1967.

Bien,

¿saben a dónde quiero llegar?

Y Nimoy, perdón, Spock se sienta al piano, y comienza a tocar este vals de Brahms, y todos empiezan a bailar a su son.

Y entonces Spock se da la vuelta y dice: «James, sé todos los valses de Brahms, y no creo que éste pertenezca a esa categoría».

A eso voy.

Quiero escuchar los valses de Brahms nunca escritos.

Quiero escuchar las piezas que Horowitz no tocó.

Creo que estamos ahora en el momento en el que accedemos a los datos de los que podemos extraer estilos, plantillas y fórmulas y todo ese tipo de cosas — Una vez más, lo que ha ocurrido en el mundo de los gráficos generados por ordenador, está llegando ahora a este mundo.

Esta será la transición.

Ahora pensamos que la música son notas y la manera como se tocan.

Y creo que está cerca.

Porque lo que acaban de escuchar no fue sino un ordenador «tocando archivos» — no Glenn Gould en la sala.

Sin embargo, es humano.

Y creo que llegaremos al siguiente paso, el verdadero sueño de la audiencia.

Cada vez que escuchemos una grabación hoy, cada vez que saquemos nuestro iPod o lo que sea, cada vez que lo escuchemos, se trata de lo mismo — está congelado.

¿No sería mejor si cada vez que lo escucháramos fuera diferente?

Esta mañana estamos más tristes, y queremos escuchar nuestra canción, la misma canción, tocada mas tristemente que ayer.

Queremos escucharla interpretada por diferentes músicos.

Queremos escucharla en diferentes lugares.

Hemos visto todos los episodios de Star Trek, y están todos basados en el holodeck también.

Cada vez que escucho esto, se me pone la piel de gallina.

Es asombroso, es excitante.

Cada vez que escucho estas grabaciones, no puedo creer que esté en la misma habitación.

No puedo creer que esté ocurriendo.

Es una experiencia muy superior a cualquier otra forma en la que hayamos escuchado algo.

Y, por último, recapitularé con un minuto de Arte Tatum.

Aquí ya sí que he superado mis expectativas.

En septiembre realizamos una nueva grabación suya en el Auditorio Shrine.

Fue un concierto que él grabó en el Auditorio Shrine en 1949.

Y tengo que decirles que tenemos un laboratorio donde construimos y medimos todo, en Raleigh, Carolina del Norte, y volamos a Los Ángeles.

Y como presidente de la compañía, no me sentía cómodo dónde estábamos.

Y esa es una sensación molesta.

cuando se ha instalado todo el equipo y hay toda una partida de ingenieros de Sony y el público va a estar allí sentado.

Entonces, colocamos el piano en ese fantástico lugar del escenario en el Shrine — que no ha cambiado desde 1949, con un aforo de 6.000 personas — y en ese fantástico lugar del escenario, Tatum comienza a tocar…

y cada nota, cada golpe, cada ligadura, cada acento, cada movimiento de pedal era perfecto, porque lo tocó para ese lugar aquel día.

Y nosotros capturamos de nuevo todo eso.

Y quisiera que lo escucharan ahora.

Y, afortunadamente, esta justo aquí — Es un bis que solía tocar.

Dura un minuto es una giga irlandesa, y quiero que perciban su humor.

(Música)
(Aplausos)
Esa misma fue la reacción de la audiencia en directo.


(Aplausos)
Muchísimas gracias, Michael, gracias por esta oportunidad.

https://www.ted.com/talks/john_q_walker_great_piano_performances_recreated/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *