Saltar al contenido
Deberes escolares » Área profesores » Como hacer esquemas para estudiar

Como hacer esquemas para estudiar

En este artículo vamos a tratar de explicar como hacer esquemas para estudiar cualquier tipo de examen (desde  exámenes de primaria o secundaria a oposiciones) utilizando ejemplos de esquemas.

Una vez que nos tenemos unos buenos apuntes estaremos en condiciones de desarrollar una nueva tarea, también de gran importancia:

Tomando como punto de partida esos apuntes pasaremos a realizar los esquemas correspondientes, que nos ayudarán a extractar lo más importante y harán aún más fácil la percepción de cada tema (y de cada materia) como un todo

 

El punto de partida no será ya una explicación oral, sino un texto escrito por nosotros mismos.

En sus términos más generales diremos que la principal característica de un esquema es su capacidad para expresar gráficamente la información contenida en un texto escrito.

 

Ejemplo de Esquema:

A partir del siguiente texto vamos a elaborar un esquema:

 

ANTECEDENTES DE LOS MODERNOS HOSPITALES
Ya en la Antigüedad clásica existieron establecimientos que pueden considerarse como precursores de los actuales hospitales. Entre los griegos, los templos de Asclepio, que dísponían incluso de una especie de dispensario (iatrion), sirvieron de asilo a enfermos y menesterosos. Los romanos dispusieron también de sus templos de Esculapio y, posiblemente, de lazaretos y hospitales para los soldados. Los primitivos cristianos organizaron asimismo refugios para los desamparados y pobres, que en un principio radicaron en la propia vivienda del obispo. En estos refugios deben encontrarse los primeros antecedentes de los hospitales propiamente dichos (nosocomios). Uno de los mayores nosocomios fue el que existió en Constantinopla en tiempos del emperador Alejo, capaz para atender a 11.000 enfermos. Durante la Edad Media se crearon numerosas fundaciones hospitalarias de carácter municipal. Entre los más antiguos hospitales figura el Hótel Dieu de Lyon ( que data aproximadamente del año 543), el Hótel Dieu de París (600), el del Santo Spirito, en Roma (650) y el de San Bartolomé, en Londres (1123). En España los hospitales nacieron también estrechamente vinculados a la Iglesia. Así ocurrió con el Hospital de Mérida (finales del siglo VI), dotado por el obispo Masona, y con el Hospital de San Lázaro, fundado por el obispo Pelayo, en León, a finales del siglo XI. También entre los árabes existieron grandes hospitales, así como escuelas de medicina.

Ejemplo de un posible esquema

  • Antecedentes modernos hospitales
    • I. Grecia -templos de Asclepio: dispensarios y asilos
    • II. Roma templos de Esculapio hospitales para soldados
    • III. Primeros cristianos refugios para pobres nosocomios (Constantinopla)
    • IV. Edad Media
  • 1. Instituciones
    • (a) municipales
      • Hotel Dieu (Lyon)
      • Hotel Dieu (París)
      • Santo Spirito (Roma)
      • San Bartolomé (Londres)
    • (b) eclesiásticas
      • España Mérida (finales s. VI)
      • León (finales s. IX)
  • 2. Árabes hospitales escuelas de medicina

 

 

 

Pasos básicos para aprender a hacer esquemas

Naturalmente, los esquemas no siempre tienen que hacerse tomando como texto base unos apuntes: pueden realizarse a partir del texto contenido en un libro, del artículo de una revista…

 

En todos los casos es absolutamente imprescindible que antes de realizar el esquema se haya leído el texto correspondiente y se hayan percibido con absoluta claridad todas y cada una de sus partes, prestando una mayor atención a aquellas que parezcan más importantes.

 

A este respecto, la operación consistente en subrayar los elementos principales tiene una gran utilidad. Serán las partes del texto que aparecen subrayadas las que proporcionarán ese esqueleto que a fin de cuentas es en realidad el esquema.

Cada idea o concepto será registrado en una misma línea, pasándose a la siguiente cuando se trate de reseñar otra idea de orden diferente.

Deberá procurarse asimismo que el esquema tenga una estructura jerárquica, esto es, que en él las ideas que posean una misma importancia o nivel sean recogidas de la misma forma (así, por ejemplo, que en ese caso el espacio que media entre el texto correspondiente y el margen izquierdo de la hoja sea siempre el mismo).

 

La utilización de distintos tamaños de letra y de diferentes colores puede ayudarte a clarificar un esquema.

 

En cualquier caso, parece cierto que la claridad de un esquema, y por consiguiente su utilidad, tiene mucho que ver con la existencia de amplias zonas del papel en blanco, esto es, sin ningún texto escrito en ellas; así se resaltan gráficamente los distintos conceptos reseñados.

Si en artículos anteriores  nos hemos referido a la importancia que adquiere el hecho de que los apuntes tengan un carácter personal no podemos menos de decir otro tanto en relación con los esquemas.  Estos deben ser claros para nosotros, y por ello deben estar abiertos a nuestras propias convenciones y formas personales de trabajar.

Una saludable costumbre es la de hacer esquemas de todo el material de estudio.

Esta operación facilita de una manera evidente las tareas de repaso y hace por tanto mucho menos pesadas y numerosas las horas dedicadas a la preparación de un examen.

Las representaciones gráficas que acompañan a los libros de texto no son en realidad muchas veces sino esquemas.

La mayor parte de las representaciones gráficas recogidas en los libros de texto son simples esquemas.

Así, sin ir más lejos, un mapa del país en el que aparezcan especificadas las distintas lenguas que en él se hablan, no es sino un esquema, por cuanto constituye una representación gráfica de algo cuya explicación escrita reclamaría un esfuerzo y un espacio mucho mayores (sería necesario, por ejemplo, referirse a las distintas modalidades lingüísticas especificando los espacios geográficos en los que se manifiestan).

Otras veces un esquema es una especie de índice que nos recuerda en unas pocas palabras el contenido de un texto mucho más amplio.

Un posible esquema del conjunto de ideas que hemos recogido en el artículo anterior, dedicado a los apuntes, podría ser el que se ofrece a continuación:

Los apuntes

  •  Introducción
  •  Importancia de unos buenos apuntes
  • Preparación previa
    • Postura adecuada
    • Material
    • Atención en los primeros momentos
    • Lectura rápida del tema
    • Conocimiento de la forma de actuar del profesor
  • 2. Cómo hay que tomar apuntes
    • Carácter personal
    • Tipos de apuntes
      • Tema tratado
      • Familiaridad
      • Existencia de otras fuentes
    • Uso de códigos diferenciadores (márgenes, tipos de letra, colores … )
    • Uso de abreviaturas
    • Ventajas
    • Visión global
      • Aspectos fundamentales
      • Búsqueda rápida de datos
      • Relaciones y clasificaciones
    • Uso adecuado de los espacios
    • Repaso de los apuntes al final de la clase
    • Los cuadernos: su utilidad.

 

Si te ha resultado útil o interesante esta información compartela en tus redes con tus amigos y/o compañeros para facilitar la tarea imprescindible de la realización de esquemas.

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *