Saltar al contenido
Deberes escolares » Arte » La escultura europea a finales de la Edad Media

La escultura europea a finales de la Edad Media

El desarrollo de la escultura se vió condicionado desde las últimas décadas del siglo XIII por diversas circunstancias en cuya base se encuentra, fundamentalmente, el cambio de mentalidad. Se asiste a la aparición de una religiosidad más individual que fomenta el surgimiento y multiplicación de imágenes de devoción, con cliente principal la burguesía. Pero por otro lado hay una laicización paralela al de la vida diaria, que en escultura aparece con la recreación de personajes de la época que aparecen en un principio idealizados, para paulatinamente ir cediendo a la individualidad y al naturalismo.

La escultura europea a finales de la Edad Media

La escultura europea a finales de la Edad Media

A partir del 1400 se produce la reaparición de la idealización tras el acercamiento entre pintura y escultura, que se tradujo en la asimilación de unos rasgos formales basados en el alargamiento de las figuras, de cierto caracter preciosista.

Este idealismo se frenaría con el naturalismo que domina la producción plástica europea a partir del segundo tercio del siglo XV, en la que Flandes adquirió un papel destacado.

Las conquistas de la plástica flamenca: individualidad y naturalismo

La colaboración de artistas flamencos en la corte gala de Carlos V determinó la fusión de las corrientes flamenca y borgoñona en Francia, dando paso a la corriente naturalista que habría de extenderse por todo occidente durante el siglo XV y del que es creador el escultor Claus Sluter, al que suceden en esta misma tendencia Claus Werve y Juan de Huerta, con el que adquiere difusión el tema del encapuchado.

 

La adopción del naturalismo

Þ  Francia

París es el centro principal, pese a la Guerra de los Cien Años, gracias a Carlos V y a sus hermanos los duques de Berry y de Borgoña. Recibe a muchos artistas procedentes de los Países Bajos (que comienzan a destacar), Dijon (capital de Borgoña), Praga (Bohemia), y Milán (Lombardía).

Con Carlos V (1364) y los duques de Berry y Borgoña, con la guerra casi cesada, y debido a su afición a la cultura, se inicia una nueva etapa en el arte francés, singularmente parisino y borgoñón.

·  París

Dos estatuas del retrato del rey y su esposa Juana de Borbón en el Palacio del Louvre de gran realismo.

–  Jean de Lieja: sepulcro del rey y su esposa, del que se conserva la figura yacente del rey en Saint Denis.

–  André Beauneveu: Santa Catalina de la Iglesia de Nuestra Señora de Courtrai, con figura alta, elegante, con largos pliegues curvos que parten de su mano izquierda llegando al suelo. Con él culmina la antigua tradición francesa.

·  Borgoña. La corriente naturalista

En ella se producen los cambios principales, pero protagonizados por artistas flamencos procedentes de zonas con una importancia creciente, que tienen un fuerte componente urbano, pero sin peso político importante. Sus artistas son reclamados por el rey y la aristocracia francesa.

a)  Jacques Baerze

Inmerso dentro de la elegancia del gótico internacional. Sus dos retablos para la Cartuja de Champmol son el inicio de un tipo de retablo que se seguirá produciendo masivamente en los Países Bajos hasta el siglo XVI, todos dorados y policromados. Los dos retablos son de madera en forma de tríptico, uno de los ellos cerrado con puertas pintadas por Melchior Broederlam. Tienen gran número de pequeñas figuritas que parecen hechas por un miniaturista.

b)  Claus Sluter. La renovación

Es el más grande escultor del momento. Su estilo es monumental y extremadamente pesado, con un volumen rotundo que significa el cambio respecto a la elegancia tradicional de París, antecediendo en ello a los maestros de la pintura flamenca. Sus profetas son como retratos, siendo muy detallista en todas las partes de las figuras.

–  Portada de la capilla de la Cartuja de Champmol (enterramiento de los duques): aunque Marville la comienza, la termina Sluter con retratos robustos y realistas de Felipe el Atrevido y su esposa, acompañados por santos protectores, mirando todos hacia el mainel donde esta una gran Virgen con el Niño.

–  El pozo de Moisés: conjunto hecho para centrar un claustro. Prisma hexagonal con las caras de seis profetas que se abre arriba en una base mayor que servía de soporte a una gran Crucifixión con la Virgen y San Juan. Cada profeta tiene un rollo o filacteria con textos de la pasión y muerte de Jesús, dando la impresión de ser un retrato. Este tipo de personaje se repetirá en Borgoña hasta finales del siglo XV.

 Bohemia

Período de esplendor con Carlos IV y su hijo Wenceslao, entre 1350-1420. Destacan las Schone Madonne (bellas vírgenes) de tipo alemán, con rasgos suaves y pliegues expresivos, llenas de encanto. Las de Krumlov, la de Wroclav tienen paralelismos en la pintura (Virgen de Roudnice).

 Inglaterra

Comienzan a fabricarse en serie pequeños relieves que se combinan formando retablos de diferente forma y tamaño, fácilmente transportables y de mediana calidad, para comerciar.

Italia

En Italia el naturalismo tuvo una forma particular, ya que se asocia al naturalismo de la escultura romana, creándose un punto directo de enlace con el mundo renacentista a través de varias generaciones de artistas, entre los que figuran Nicolas y Andrea Pisano dentro del ámbito trecentista. Muy rápido la escultura italiana irá limpiando el goticismo para mostrar ya en el siglo XV una gran adhesión al estilo renacentista.

Generación posterior a los discípulos de N. Pisano

–  Tino de Camaino: afecto al sistema del non finito.

–  Lorenzo Maitani: al ser el arquitecto de la Catedral de Orvieto se le atribuye el conjunto escultórico de su fachada, con relieves que van desde el Génesis al Juicio final. En la portada utiliza el mármol y el bronce que le dan un aspecto deslumbrante. Se preocupa por dar profundidad a las escenas que suceden en un exterior.

–  Andrea Pisano: En las Puertas de Bronce del Baptisterio de Florencia continúa la tradición románica de las puertas de bronce, pero organiza de modo distinto la decoración, resolviendo los problemas con economía de medios y sencillez extrema, influenciado por el pintor Giotto. Destaca el grupo de tres personajes vistos de frente solapados por otros tres de espaldas. En las Zonas bajas del campanile de la catedral de Florencia trabaja con Giotto, y suyas son las esculturas incritas en sus zonas bajas con un formato de hexágono irregular.

–  Andrea Orcagna: tabernáculo de Or san Michele (Florencia).

“Gótico internacional”

Aunque normalmente la Edad Media italiana se corta en el 1400 cuando se empieza a hablar de Renacimiento, en ésta época hay capítulos importantes del “Gótico Internacional”:

–  Milán: no hay propiamente una escuela lombarda como en pintura, pero destcan el Cristo y la samaritana de la Catedral, obra de Giovaninno de Grassi, y el Retrato Ecuestre de Bernabo Visconti de Bonino de Campione.

–  Venecia: los hermanos delle Masegne realizan la iconostasis de San Marcos.

–  Florencia: Nanní di Banco realiza la Puerta de la Mandorla de la Catedral, que es en buena medida gótica. En las segunda puertas del Baptisterio de Florencia trabaja Ghiberti con su estilo inicial gótico, aunque después empieza a encabezar el Renacimiento cuatrocentista y cierra el Gótico internacional.

El realismo flamenco de los Países Bajos y su difusión

Los Países Bajos eran ricos y densamente poblados, con ciudades que eran verdaderos centros comerciales internacionales, especialmente Brujas. En el siglo XV gran parte del país pasa a manos de Felipe el Bueno, duque de Borgoña, cuya capital era hasta ahora Dijon, pero prefiere residir en el Condado de Flandes, con Brujas y Gante como centros, y el condado de Brabante con Bruselas. Este asentamiento de los duques, unido a la crisis en París por la ocupación militar inglesa, hicieron que se desarrollaran como centros artísticos los Países Bajos.

Los clientes, aparte de los duques y sus hermanos, fueron la pequeña aristocracia, comerciantes extranjeros (italianos y castellanos) y las asociaciones comunales ciudadanas. Aunque ya existían notables artistas, la aparición de dos o tres excepcionales hacen de los Países Bajos centros difusores europeos. A pesar de que Sluter había señalado el camino, no fue donde se produjo el desarrollo.

En el primer tercio del siglo XV destaca Jean Delemer, con su grupo de la Anunciación en la Catedral de Tournai, y se produjo gran cantidad de escultura en madera. La escultura compite en calidad con la pintura.

Más tarde se imponen las novedades de la pintura. Se producen gran cantidad de trípticos o polípticos en madera con abigarradas composiciones con muchas figuras, pero su realización era mediana, aunque no todas las obras fueron así (buenas obras como el retablo exportado a Laredo, y en fechas tardías hubo excelentes escultores, como el anónimo maestro de Amberes que realizó las piezas del retablo de la capilla funeraria en San Lesmes).

Þ  Francia

La guerra con Inglaterra tuvo resultados desastrosos (como la separación del ducado de Borgoña). Hubo una destrucción masiva de pintura, pero lo poco que se conserva es de gran calidad. Hay varios focos debido a la crisis política.

·  Escuela de Borgoña

Pervive la huella de Sluter, con su estilo monumental y pesado.

–  Claus de Verve: trabaja en los sepulcros de Juan sin Miedo.

–  Juan de la Huerta: español, su obra es totalmente borgoñona. Trabajó en el Sepulcro de Juan sin Miedo (Cartuja de Chapmol), aunque no lo terminó. Destaca la obra de la Virgen con el Niño para la capilla de Philippe Mahefoing.

–  Antonio Moiturier: también trabaja en la tumba de Juan Sin miedo, y se le atribuye, con dudas, el Santo Entierro. Se extiende por entonces en toda Francia y Borgoña un tipo de Santo Entierro o sepulcro monumental con diversas esculturas exentas que componen una escena emotiva en torno al bulto principal del Cristo muerto sobre el sarcófago o tumba.

Þ  El Imperio

Es una época brillante de la escultura. Hay diversidad de centros, y se producen gran cantidad de retablos en madera, pintados, tallados o mixtos, de dimensiones solo superadas por los españoles. La gran explosión se produce bien entrada la segunda mitad del siglo XV.

–  Hans Multscher: trabajó mucho la madera, pero destaca su obra en piedra Cristo Varón de Dolores del mainel de la catedral de Ulm.

–  Nicolás de Leyden (o Gerhaert): procedente de los Países Bajos, activo en Estrasburgo. No se sabe bien donde situarle. Entre sus obras están dos bustos en la Portada de la Cancillería de Estrasburgo, mientras otro busto relacionado con ellos, el Hombre pensativo (M. de la obra de Nuestra Señora de Estrasburgo), es novedoso en lo compositivo y moderno en su meditativa expresividad.

·  Zona del Tirol
a)  Michel Pacher

Pintor/escultor, pero más gótico como escultor. Su Retablo de San Wolfgang destaca con una escultura profusa, cargada en ornamentos y refinada en la ejecución de las figuras, ordenada alrededor de una Coronación de la Virgen.

·  Zona de Franconia
a)  Tilmann Riemenschneider

Desarrolla su obra en Wuzburgo. Es escultor/pintor. Su escultura en madera de tilo tiene figuras nerviosas y delgadas, de rasgos largos, finos y quebradizos. Como pintor también sus obras tienen el mismo estilo.

En madera destacan las siguientes obras:

–  Retablo de la Santa Sangre en la Iglesia de Santiago de Rothenburg. Las figuras exentas alternan con relieves planos (Entrada en Jerusalén).

–  Retablo de Creglingen.

–  La Magdalena que formó parte del retablo de Munnerstadt, cubierta por completo de su cabello.

En mármol y piedra, con la misma calidad que las de madera, destacan:

–  El monumento funerario del obispo Rudolf von Scherenburg. En él es más visible el oficio usual del artista que los rasgos del retratado.

–  Adan y Eva de la portada de la Iglesia de Santa María en Wurzburgo.

b)  Veit Stoss

Desarrolla su obra entre Nurember y Cracovia. Sus principales obras son:

–  Retablo de la Iglesia de la Virgen de Cracovia, obra maestra de la estatuaria, centrada en una gigantesca Muerte de la Virgen muy personal compositivamente (el retablo se abre en alas cubieras totalemente por relieves). Su estilo está muy influenciado por lo flamenco.

–  Tumba de Casimiro IV Jagelon en Cracovia.

En la última parte de su vida, al volver a Nuremberg pasa una época oscura, aunque sigue realizando algunas obras maestras (Anunciación con el Rosario en San Lorenzo de Nuremberg), pero con un estilo más italiano.

c)  Adam Kraft

Autorretrato en el Tabernáculo de San Lorenzo.

Evolución de la escultura española: el siglo XIV y el camino hacia la expresividad

España alternó en su escultura rasgos provenientes de la plástica italiana con el gótico naturalista de raíz flamenca, y posteriormente con lo germánico. La nobleza no constituye todavía un grupo de apropiados promotores.

2.1  Siglo XIV. El camino hacia la expresividad

Grandes logros de un mayor carácter expresivo, con diferencias regionales entre reinos.

Þ  Cataluña

Es el foco destacado, y sus obras dan testimonio de la influencia italiana. Su etapa de despegue estuvo influenciada por la invasión de artistas franceses y del conocimiento de lo italiano. Destacan el italianizante Bartomeu de Robio y Pere Morages, autor del sepulcro del obispo Fernández de Luna en la Seo de Zaragoza, paradigma del tipo de sepulcro de la Corona en su organización iconográfica y adelanto realista en la cuidadosa observación de gestos y rostros.

Þ  Reino de Navarra

Janin Lomme da impulso a toda la escultura navarra de entonces, con el sepulcro del rey y su esposa (Catedral de Pamplona).

Þ  Corona de Castilla

Atisbos del gótico internacional en algunas obras, como el sepulcro de Gómez Manrique y su esposa (Museo de Burgos), con retratos de los dos sin parangón en la Península. Gigantescos retablos de artistas extranjeros en las catedrales de León y Salamanca:

–  Dello Delli en Salamanca.

Dello Delli - Retablo catedral vieja Salamanca

Dello Delli – Retablo catedral vieja Salamanca

–  Nicolás Francés en León deja una escuela tras de sí con grandes retablos como los de La Bañeza y la Catedral de León, y murales o miniaturas (San Isidoro de León).

La escultura se vivifica en Salamanca con el obispo Diego de Anaya, que contrata un escultor extranjero para realizar su monumental tumba en el claustro de la catedral.

2.2  Siglo XV: Los aportes internacionales

La Península Ibérica ha sufrido muchos cambios. Se consuma la crisis de Cataluña y Castilla sufre una situación conflictiva durante Enrique IV, pero ésto no impide un espectacular despegue de las artes, fuertemente relacionado con los Países Bajos y con el Norte de Europa. Lo mismo que en el Imperio, este último Gótico se prolonga hasta más allá de 1500.

Hay un cambio de tendencia con respecto al siglo anterior, dejándose sentir el influjo de varios centros de irradiación: Francia, Países Bajos e Italia. Destaca el interés que tuvieron los escultores por la realidad profana como fuente de inspiración, así como el interés por las emociones.

Þ  Cataluña

Gran profusión de obras, con influencia italiana o flamenca fusionadas, siendo sus mayores representantes Guillén Sagrera y Pedro Juan.

·  El pleno 1400

Es donde actúan la mayoría de los artistas:

–  Pere Sanglada: Coro de madera de la Catedral de Barcelona (primero de los coros de talla españoles). También trabaja otros materiales. Yacente del modificado sepulcro del obispo San Oleguer. En el coro de Barcelona colaboraron con él Antoni Canet y Pere Oller.

–  Antoni Canet: sepulcro del obispo Escales en la Catedral de Barcelona, poco original compositiva e iconográficamente, pero es obra maestra del gótico por su destreza y la elegancia con que resuelve la larga imagen del yacente y los extraordinarios plorantes del frente.

–  Pere Oller: retablo de San Pedro de la Catedral de Vic, muestra del gran desarrollo alcanzado por el retablo en alabastro complementado con policromía.

–  Pere Johan: su retablo mayor de la Catedral de Tarragona supera al de Pere Oller, aunque le falta unidad estilística y compositiva. Su obra es desigual. Su Bancal de Tarragona con la historia de Santa Tecla es su obra maestra y tal vez la principal escultura medieval catalana, ya que en ella se ve claramente el espíritu del gótico internacional con figuras nerviosas, virtuosamente realizadas, con un expresionismo contenido que se destacará en otros momentos, resaltado por una discreta policromía. Otras obras suyas son la zona alta de la fachada de la Generalitat de Barcelona, con el famoso San Jorge, y el Bancal de la Seo de Zaragoza.

Þ  Castilla

A las dos Castillas, León y Andalucía llegan contínuamente esculturas y escultores flamencos, borgoñones y alemanes. Castilla, relegada en el siglo XIII, recupera a mediados del XV el papel protagonista, abriéndose una última etapa de producción artística potagonizada por maestros como Juan y Simón de Colonia y Gil de Siloe en el ámbito burgalés, y Juan Aleman y Egas Cueman en el toledano.

·  Burgos

Es el foco principal. Seguramente con Hans de Colonia llegaron otros escultores mal conocidos.

a)  Gil de Siloe

Aunque el Sepulcro del obispo Alonso de Cartagena es de autor desconocido, por su estilo se supone que tuvo que trabajar de joven en él. Es el más importante de los escultores que trabajan una generación más tarde. Estaba fuertemente relacionado con el poder, que le encargó numerosas obras, Trabajó indistintamente la madera (policromada por su amigo Diego de la Cruz) y el alabastro.

Su estilo es muy particular, pero característico del barroquismo de este gótico lineal. Cuida el detalle al mínimo, incluyendo detalles secundarios. Trabajando la madera fue excepcional, introduciendo telas encoladas o incrustaciones de algunos metales, pero generalmente todo estaba tallado.

Las composiciones son abigarradas, y se complace planteándose problemas difíciles en la talla o escultura de algunos fragmentos. Consigue efectos táctiles muy distintos dependiendo del material, siendo quizás esta su mayor virtud, sobre todo en el alabastro. Tiende a distanciarse emotivamente de la obra, resultando una solemnidad algo inexpresiva (Crucifijo del Retablo de Miraflores).

En la Cartuja de Miraflores destacan las siguientes obras:

–  Sepulcro monumental de Juan II y su esposa Isabel de Portugal: Exento en medio de la capilla en la Cartuja de Miraflores.

–  Sepultura del Infante Alfonso: de bulto redondo y arrodillado mirando al altar de la capilla, donde puso su empeño en las calidades táctiles del alabastro. Toda la obra está enmarcada por un arco cairelado de minucioso calado.

–  El retablo mayor: de talla y policromado. De diseño muy original con esquemas tomados de miniaturas y tapices con un programa de componente eucarístico. Algunas esculturas son magistrales, como la del Crucificado y los grandes santos que sirven de entrecalles en la zona inferior, pero también hay otras de menor calidad, posiblemente hechas por su taller. Da una profunda impresión en el fondo de la capilla, llenando todo el muro casi invadiendo las vidrieras superiores.

En la Catedral de Burgos:

–  El Retablo del Arbol de Jesé: en la catedral, para la capilla funeraria del obispo Juan de Acuña. El cuerpo tumbado de Jesé sirve de vástago central donde se ordena toda la obra y termina con un pedestal de tres tallas espléndidas de la Virgen, el Niño, la Iglesia y la Sinagoga.

–  Retablo de Santa Ana en la Capilla de los Condestables: aquí su lenguaje duro se dulcifica por el preciosismo de las pequeñas imágenes sentadas y de pie presididas por una Santa Ana triple.

b)  Otros autores

–  Simón de Colonia: agrupa a varios escultores incluido él mismo y su hijo Francisco (retablo mayor de San Nicolás).

–  El Maestro de Covarrubias: tal vez fue el autor extranjero de la Epifanía de la Colegiata de Burgos.

·  Palencia

Alejo de Vahía colabora con Pedro Berruguete en retablos mixtos:

–  Centrados en una escultura (Encuentro de Santa Ana y Joaquín en Paredes de Nava).

–  Con varias figuras en las entrecalles (Becerril de Campos).

Pero sobre todo trabaja con imágenes sueltas, como el Crucificado, Virgen y Niño y Santa Ana Triple de la Catedral de Palencia. En relieve destaca la Muerte de la Virgen de la Catedral de Palencia.

·  Toledo

A principios de siglo llega un grupo de artistas, dirigidos por Hanequin de Bruselas:

–  Egas Cueman: hermano de Hanequin, colaboró con Guas en el Palacio del Infantado de Guadalajara, y en solitario en el Monasterio de Guadalupe.

–  Sebastián Almonacid.

–  Rodrigo Alemán: especialista en sillerías de coros (Catedral de Toledo).

En este ambiente vivió el autor del Sepulcro del Doncel de Sigüenza.

Þ  Sevilla

Los escultores comienzan en este siglo a trabajar la catedral hecha en el siglo anterior:

–  Mercante de Bretaña: Sepulcro del Cardenal Cervantes y los bultos de barro cocido de las fachadas de los pies.

–  Pedro Millán: sucesor del anterior.

–  Jorge Fernandez: parece ser el más interesante de los escultores que trabajaron en el descomunal retablo mayor.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *